Como todos los evangelios de este día, el de este año vuelve a plantearnos el tema del mesianismo de Jesús, ¿qué clase de Mesías es Jesús? El Mesianismo de Jesús está basado en el servicio a los más vulnerables de la tierra y en la inclusión de todos aquellos que el legalismo judío y el poder Romano habían excluido y condenado. Su Mesianismo entonces supera la idea nacionalista, militar y política como se entendía en el Antiguo Testamento.
Este Mesianismo que Jesús ha elegido, es la forma que Dios ha elegido para salvar al mundo, nuestro compromiso con los últimos y con los excluidos es nuestra forma de participar en la misión que Jesús recibió del Padre. En estos tiempos que nos dicen de crisis, debemos tener presente que, a pesar de todo, nuestra obligación para con esos que, de verdad, ocupan el corazón de Dios.
Jerusalén tiene un significado especial para Jesús, es donde Él va a consumar su Amor a la humanidad de todos los tiempos.
Nosotros hoy sólo podemos contemplar y agradecer este tributo de Amor, clave para entender los hechos que vamos a celebrar en esta semana. Y, por supuesto, colaborar con Dios en esa misión hacia los más desfavorecidos que nos dignifica como personas.
No me resisto a acabar sin recomendaros el Himno Cristológico de san Pablo de la carta a los Filipenses que nos ofrece la liturgia de hoy. Y como nos dice, que esta Semana Santa sea ocasión para contemplar uno de los mayores misterios de nuestra fe.
Este Mesianismo que Jesús ha elegido, es la forma que Dios ha elegido para salvar al mundo, nuestro compromiso con los últimos y con los excluidos es nuestra forma de participar en la misión que Jesús recibió del Padre. En estos tiempos que nos dicen de crisis, debemos tener presente que, a pesar de todo, nuestra obligación para con esos que, de verdad, ocupan el corazón de Dios.
Jerusalén tiene un significado especial para Jesús, es donde Él va a consumar su Amor a la humanidad de todos los tiempos.
Nosotros hoy sólo podemos contemplar y agradecer este tributo de Amor, clave para entender los hechos que vamos a celebrar en esta semana. Y, por supuesto, colaborar con Dios en esa misión hacia los más desfavorecidos que nos dignifica como personas.
No me resisto a acabar sin recomendaros el Himno Cristológico de san Pablo de la carta a los Filipenses que nos ofrece la liturgia de hoy. Y como nos dice, que esta Semana Santa sea ocasión para contemplar uno de los mayores misterios de nuestra fe.